Proyectos y la Junta de Socios

Por el alto perfil de los socios de la empresa, los proyectos sobre los que decide la Junta de Socios, o Consejo de Administración, son los que tienen que ver con la gran visión para la organización, los que marcan el rumbo de largo plazo, los que tienen implicaciones económicas mayores en proporción al presupuesto anual o semestral, o implicaciones de fondo en la cultura de la empresa.

Ejemplos de proyectos a este nivel son: Nuevas construcciones, crecimiento en sucursales, adopción de sistemas informáticos ERP ó CRM, contrataciones especiales, planes financieros de largo alcance, entre otros.

El equipo directivo, como proveedor de elementos de decisión para la Junta de Socios, deberá tener una pauta para el manejo de información, esto significa contar con el formato y regularidad en la comunicación de los datos que generan diversas áreas de la empresa. Esta disciplina administrativa será fundamental al momento de iniciar y dar seguimiento a nuevos proyectos.

A continuación te compartimos 8 puntos a considerar cuando se decide sobre un proyecto:

1. Presentar el proyecto con claridad y estructura: Incluir propósito, alcance, responsables, tiempos, costos estimados y retorno esperado. La presentación debe responder: ¿qué problema resuelve o qué oportunidad aprovecha?

   
   

2. Comparar con alternativas viables: Antes de aprobar, contrastar con otras opciones (hacer nada, hacerlo diferente, subcontratar, escalar en fases). Esto evita decisiones por impulso.

   
   

3. Revisar impacto financiero y operativo: ¿Cómo afecta la liquidez, el flujo de efectivo, y la operación actual? ¿Qué recursos humanos y técnicos demanda?

   
   

4. Evaluar riesgos concretos del proyecto: Identificar posibles escenarios negativos (legales, financieros, de mercado) y definir cómo se podrían mitigar.

   
   

5. Determinar alineación con la visión de la empresa: Preguntarse si este proyecto contribuye al plan estratégico y si es coherente con los valores de la empresa.

   
   

6. Definir condiciones mínimas para avanzar: Por ejemplo: “Solo se ejecuta si se consigue financiamiento externo” o “si se valida la demanda en 30 días”.

   
   

7. Asignar responsables del seguimiento y ejecución: No basta con aprobar. ¿Quién da seguimiento?, ¿quién ejecuta?, ¿cómo se medirá el avance? En Alta Dirección tenemos un servicio destinado al acompañamiento y supervisión de proyectos estratégicos.

   
   

8. Establecer un punto de revisión y decisión posterior: Programar una fecha para revisar los avances iniciales y decidir si continuar, pausar o ajustar.

Una adecuada dinámica entre socios y directivos, una correcta estructura de información, así como el asesoramiento correcto, facilitará la ejecución de proyectos que definirán el rumbo y destino de la empresa.

¿Has tenido alguna experiencia con proyectos especiales? compártela en los comentarios.